jueves, 27 de junio de 2013

Al crear castillos en el aire, por muy denso que este pueda parecernos, corremos el riesgo de que, de un momento a otro, todas esas ilusiones construidas se desvanezcan sin más. Cuando eso ocurre y ves que todos tus sueños se rompen contra el suelo, no puedes hacer nada a parte de observar los pedazos de lo que podría haber sido y, sin embargo, no fue. A veces te hieren los añicos, se te astillan dentro y cuesta deshacerse del dolor y la impotencia, otras simplemente se avanza como si nada hubiera ocurrido. No es bueno conformarse pero tampoco ser un inconformista.

~Desilusionada